EN FINAL VIBRANTE, EL TORDILLO COQUELIZE SUPERO POR MEDIO PESCUEZO A MY HAPPINESS.
En violenta arremetida exterior, el tordillo Coquelize se alzó ayer, en el césped de San Isidro, con el Gran Premio 25 de Mayo (G.I) al superar por medio pescuezo a My Happiness.
El pupilo de Marcelo Sueldo empleó el valioso tiempo de 2’24”35c. para recorrer la distancia de 2.400 metros y le permitió el lucimiento al jockey Mario Leyes, quien también ganó la edición anterior de dicha prueba, pero apilado en esa oportunidad en Flag’s Boy, ejemplar que ayer clasificó en cuarto lugar y fue dirigido por Rodrigo Blanco.
En tanto, Inminente, que salió cotizado favorito (prometía 2,20 pesos), no respondió como se esperaba, entrando en la octava posición.
Potro Sahara punteó durante casi 2.250 metros, pero Ricardo no le dio respiro y, a pesar de escaparse en los comienzos de la recta de sus perseguidores más inmediatos (Fricoteiro y Star In You), comenzó a apagarse, y arriba, cuando gateaba en los últimos 150 metros, lo pasaron como árbol caído. El hijo de Potrillón hizo parciales de 23”40c., 47”24c. y 1’11”18c. para pasar los primeros 1.200 metros, sacando una ventaja, a esa altura, cercana a seis cuerpos.
Hasta entonces, Coquelize se venía desempeñando en séptimo lugar del lote, a unos doce largos del puntero, mientras My Happiness actuaba detrás, mejorando ambos algunos lugares cuando ingresaron en la recta final.
Después fue jugarse todo a una atropellada salvadora que le sirvió al defensor de la caballeriza Los Luises para llevarse el triunfo, sumando así a su historial la séptima victoria.
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